Pensaba hacer una lista de las cosas que me gustaría que sucedieran hoy; pero el día es casi perfecto: el mundo gira, las cosas marchan, el tiempo corre... y yo estoy parada. Parada sobre mis pies, y no sobre mis manos. Parada sobre mi eje y no recargada. En equilibrio. Nada ni nadie falta; y sin embargo, mucho es deseable. Después de tanto camino, me hallo bien y contenta. El día es mío y es mi cumpleaños.
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